HISTORIA DE LOS HEROES DEL PERU
Coronel E. P. Alfonso Ugarte Vernal
7/6/1879 -- 7/06/2023
Prólogo
Guillermo Canales Goicochea
Iniciamos esta sección, con el objetivo principal de promover en la memoria de la juventud Peruana la gesta heroica de los defensores del Perú durante la cruenta Guerra de Pacífico; destacando en esta oportunidad el heroísmo del Coronel Ejército Peruano Alfonso Ugarte Vernal, quien se inmolara en defensa de nuestra soberanía, bajo las órdenes del Gran Mariscal de Ejército Peruano Francisco Bolognesi; al igual que otros bravos valientes en el infausto escenario de la Batalla de Arica. Si bien existen los libros y tratados de Historia del Perú, así como también las obras de los Historiadores; vamos a incluir textos e imágenes que nos ayuden en nuestro objetivo.
Citar esta valiosa pagina de nuestra Historia, nos permite mostrar la imagen del Heroe, del Peruano que ofreció su vida en defensa de nuestro Perú, con la firme idea de que esa era su deber y el único camino y lo cumplió "Hasta quemar el ultimo cartucho " junto al valeroso y heroico Gran Mariscal del Perú, Francisco Bolognesi .
Como Peruanos debemos sentirnos orgullosos de la gesta heroica de Ugarte y defender su memoria porque es lo menos que podemos hacer , honrar la memoria de los héroes del Perú.
Citar esta valiosa pagina de nuestra Historia, nos permite mostrar la imagen del Heroe, del Peruano que ofreció su vida en defensa de nuestro Perú, con la firme idea de que esa era su deber y el único camino y lo cumplió "Hasta quemar el ultimo cartucho " junto al valeroso y heroico Gran Mariscal del Perú, Francisco Bolognesi .
Como Peruanos debemos sentirnos orgullosos de la gesta heroica de Ugarte y defender su memoria porque es lo menos que podemos hacer , honrar la memoria de los héroes del Perú.
Guillermo Canales Goicochea
ALGUNAS OPINIONES ACERCA DE NUESTRO HÉROE
El Historiador Jorge Basadre
En su Historia de la República del Perú, en el capítulo sobre la batalla de Arica, transcribe las que sería las dos primeras fuentes: Un telegrama oficial fechado en Quilca el 15 de junio de 1880 que recogía los datos suministrados por el vapor inglés Columbia, que acababa de llegar del Sur:
“El Coronel Alfonso Ugarte,
como los demás, no quiso rendirse y, habiéndosele acabado la munición, echó
mano de su revólver, empleando bien sus tiros; pero como fue acosado por gran
número de chilenos, pereció al fin en un caballo blanco”.
El opúsculo escrito por Luis B. Cisneros, señala en El Comercio de
Lima, fue publicado en el mismo junio de 1880
"...nacido en la ciudad de Iquique, había vivido niño y hombre. En esa playa histórica, con el recuerdo imperecedero del noble sacrificio de la roca. Esa visión apareció sin duda a sus ojos en las angustias supremas del honor militar, y superando a aquellos mártires, arrojó centellante su espada al abismo, tornó brida, espoleó su caballo y se lanzó con él en el espacio, siguiendo los vívidos rayos del acero. La cabalgadura rodó hasta la orilla del mar; el cadáver de Ugarte quedó sobre una roca del despeñadero. Allí está aún a las miradas del enemigo, del navegante extranjero, de nuestros propios hijos, del universo entero.
"...nacido en la ciudad de Iquique, había vivido niño y hombre. En esa playa histórica, con el recuerdo imperecedero del noble sacrificio de la roca. Esa visión apareció sin duda a sus ojos en las angustias supremas del honor militar, y superando a aquellos mártires, arrojó centellante su espada al abismo, tornó brida, espoleó su caballo y se lanzó con él en el espacio, siguiendo los vívidos rayos del acero. La cabalgadura rodó hasta la orilla del mar; el cadáver de Ugarte quedó sobre una roca del despeñadero. Allí está aún a las miradas del enemigo, del navegante extranjero, de nuestros propios hijos, del universo entero.
Esa roca es casi un altar.
Constituye de hoy en adelante la más sublime lección para las generaciones
peruanas del presente y del porvenir.
-Ah!. Felices los que saben
morir engrandeciendo el nombre de la patria."
Gerardo Vargas Hurtado, en el libro "La Batalla de Arica" nos dice:
"No habían transcurrido
quince días de la ocupación de Arica, por parte de las armas de Chile, y ya el
autor de estas líneas, acompañado de sus padres, regresaba a este puerto
procedente de Tacna, a donde nos habíamos dirigido huyendo de los diarios
bombardeos de la escuadra chilena.
Desde el primer instante de nuestra llegada
oímos narrar la muerte del valeroso Tarapaqueño en la misma forma que lo han
hecho los historiadores imparciales. Recordamos con este motivo haber visto la
osamenta de un caballo desbarrancado durante muchos días, detenido en los
peñascos fronterizos al actual parque, sobre el camino conocido con el nombre
de La Cinta. Se decía que ese caballo era en el que el coronel Ugarte se había
precipitado desde la cumbre del Morro".
Según Antonio Zapata ( historiador,
catedrático y columnista peruano, reconocido por sus investigaciones y
artículos sobre la historia y la realidad socio política del Perú ).
Además
de comentar acerca del heroísmo de Francisco Bolognesi y Miguel, durante la
cruenta Guerra de 1879. Los
héroes son personas corrientes como tú o como yo, pero que son confrontados a
una situación dramática. Los héroes toman una decisión moral que los lleva a
perder la vida. Tienes que morir por tu bandera en una situación en la que
estás perdido y lo lógico sería rendirte.
Hay
algo particular en el caso de Alfonso Ugarte, formó un batallón con su propio
dinero. ¿Eso fue común en la guerra?
Sí,
el Ejército que peleó en Lima es diferente al profesional, al que peleó en el
sur. Cuando el presidente Piérola convoca a la Nación a formar un Ejército, el
íntegro es del estilo de Alfonso Ugarte. La
diferencia es que Alfonso Ugarte fue un civil que se sumó en la primera etapa.
Claro. En un primera etapa se suma la gente local. Alfonso Ugarte era alcalde
de Iquique, donde empieza la guerra.
Alejando Tudela, ( historiador y periodista Peruano )
En el año 2010, publica un libro titulado Guerra del Pacífico: Alfonso Ugarte, de
la leyenda a la realidad, que contiene testimonios y documentos recientemente hallados que
reconfirman el heroísmo y la valentía de Alfonso Ugarte, inmortalizada en el
cuadro que ilustra esta nota, que se encuentra en el Museo Nacional de
Arqueología, Antropología e Historia del Perú (Pueblo Libre). El lienzo es obra
del pintor italiano Agostino Marazzani Visconti.
El
historiador Dr. Joseph Dager (Licenciado en Historia por la PUCP (1996), Doctor en Historia UCA Chile (2008). Profesor del Departamento de Humanidades y de la Maestría en Historia de la PUCP.)
En un libro de reciente publicación que está despertando inusitado interés en medios académicos: “Historiografía y Nación en el Perú del siglo XIX” (PUCP, 2009).
En un libro de reciente publicación que está despertando inusitado interés en medios académicos: “Historiografía y Nación en el Perú del siglo XIX” (PUCP, 2009).
Según el autor, hay un conjunto
de mitos y falacias que hoy es necesario revisar. Hay, advierte, historias que no provoca
escuchar, que no generan orgullo, pero que es necesario volver sobre ellas
porque solo es posible la reconciliación a partir de un pasado veraz.
–¿Y
seguimos necesitando héroes nacionales?
–Por
supuesto. Como toda nación, seguimos necesitando héroes nacionales. Pero
debemos repensar nuestra historia. Por ejemplo, hoy admiramos a Alfonso Ugarte
“solo” porque no dejó caer la bandera peruana en manos de los chilenos. Tal vez
fue cierto, pero en todo caso Alfonso Ugarte fue héroe por varias otras
razones: tenía dinero y pudo irse, pero se quedó a luchar. Además, usó su
fortuna para armar batallones. La historia del sacrificio fue publicada días
después de ocurrido en el diario La Patria, pero los historiadores del siglo
XIX no la incorporan. Los que sí lo hacen son los historiadores del siglo XX.
BIOGRAFÍA DE ALFONSO UGARTE
- Nacimiento: 13 de julio de 1847 Iquique, Provincia de Tarapacá, Perú
- Fallecimiento: 7 de junio de 1880 Arica, Perú
- Padres: Narciso Ugarte y Rosa Vernal Carpio
Alfonso Ugarte Vernal, fue un empresario, comerciante, agricultor y militar peruano, héroe de la Guerra del Pacífico. Obtuvo el grado de coronel EP. Fue jefe de la Octava División en la defensa de Arica, bajo el mando del Coronel Francisco Bolognesi. Participó heroicamente en la batalla de Arica (7 de junio de 1880), defendiendo la bandera patria de las manos del enemigo durante la batalla, cuando se vio rodeado por el enemigo en el morro, se lanzó al mar defendiendo el honor de la bandera nacional
Alfonso Ugarte nació en la ciudad de Iquique en la Provincia de Tarapacá. Su partida de bautismo, según consta en el libro N.ºXXXVI, de la parroquia de San Lorenzo de Tarapacá, está fechada el 13 de julio de 1847 , sus padres fueron Narciso Ugarte y Rosa Vernal Carpio, acaudalados comerciantes. Estudió en su ciudad natal y en Valparaíso, donde se graduó de contador. La familia Ugarte era de tradición empresarial pues se dedicaba a la industria salitrera en la ciudad de Iquique. Alfonso Ugarte fue un administrador de aguda perspicacia para los negocios, como lo demuestran las crónicas de la época. Supo asociarse con Antonio Cevallos y juntos formaron la empresa más grande y prospera de comercio de salitre en Iquique, la casa comercial Ugarte Cevallos y Cía. La gestión de la empresa salitrera llevada a cabo por el insigne peruano, incrementó notablemente la riqueza de la misma, que ya contaba con una capital considerable al momento de pasar a manos de quien se convertiría en un héroe militar peruano..
Alfonso Ugarte siempre tuvo un fuerte sentimiento nacionalista hacia la que él consideraba su patria. Esta marcada inclinación se dejó ver en múltiples ocasiones antes del advenimiento de la Guerra del Pacífico. En agosto de 1868, por ejemplo, Alfonso Ugarte proporcionó ayuda humanitaria a la población que había sufrido el terremoto que asoló Iquique y Arica. A la edad de 29 años (1876) fue elegido alcalde de su ciudad natal, cargo que ocupó y desde el cual realizó una buena gestión administrativa.
En el sector público llegó a ser alcalde de Iquique , fué miembro de la Beneficencia local y uno de los fundadores en diciembre de 1870 de la Compañía de Bomberos de Iquique, una de las más antiguas del Perú, llegando a ser tercer teniente de la misma.
(Fuente: https://blog.derrama.org.pe/y-quien-fue-alfonso-ugarte/)
Al inicio de la Guerra del Pacífico, Alfonso Ugarte, que se encontraba en preparativos para viajar a Europa por asuntos de negocios de la firma Ugarte Zeballos y Compañía que él mismo había creado, decidió quedarse en su ciudad natal para contribuir personalmente en su defensa. Organizó un batallón con su propio dinero, batallón integrado por obreros y artesanos de Iquique, al que nombró como el Batallón “Iquique N° 1”, conformado por 429 soldados y 36 oficiales, cuyo mando asumió. Hizo testamento y dejó constancia que aplazaba su matrimonio con su prima Timotea Vernal.
Ante el peligro inminente, Ugarte decide quedarse. En esos meses aciagos, sus amigos chilenos le ofrecieron protección y le sugirieron salvar sus riquezas. Por entonces, el Almirante Miguel Grau libraba la batalla de su vida en el mar sureño.
No es difícil imaginar entonces la presión que recibió Ugarte para abandonar el Perú. En su círculo, la mayoría ya había optado por fugarse a Europa. Era lo más sensato para ellos. El país estaba en bancarrota y no habían armas ni tropas. La armada estaba tan desamparada, que el coronel en retiro Francisco Bolognesi pidió volver a la actividad. Ugarte debía ponerse a salvo, y proteger a su madre y a sus hermanas. No debía arriesgarse, pues su futura esposa lo esperaba. Pero Ugarte resistió esas presiones y decidió defender al Perú.´
Ugarte reclutó a casi quinientos hombres (entre obreros y artesanos) para defender Tarapacá. Gastó una fortuna para organizar y mantener ese regimiento. Entregó 10,000 soles para la compra de armamento, además de donar 1,000 soles mensuales a las tropas de Bolognesi. Sin tener vocación militar, ni saber mucho de guerra, Ugarte se hizo coronel.
Y todo ese tiempo, Ugarte supo que todo era en vano. Al leer sus cartas, el lector percibe que Ugarte ya sabía cuál era su destino.
En una carta a su primo, Ugarte escribió:
“Tenemos pues, que cumplir con el deber del honor defendiendo esta plaza hasta que nos la arranquen a la fuerza. Ese es nuestro deber y así lo exige el honor nacional. Estamos esperando ser atacados por mar y tierra…. Estamos resueltos a resistir con toda la seguridad de ser vencidos, pero es preciso cumplir con el honor y el deber… ¡Qué desesperante es mi situación!, pero no por eso me doy por vencido sino que por el contrario debo hacer los mayores esfuerzos en la defensa de la honra nacional…”
Ugarte participó en la batalla de Tarapacá, el 27 de Noviembre de 1879. Aunque fue herido en la cabeza, le sobraron fuerzas para auxiliar a los heridos. Días después se trasladó a Arica, con el fin de asistir al coronel Francisco Bolognesi. Quizá lo hizo al presentir lo que sucedería luego. Efectivamente, el 31 de Diciembre de 1879, una poderosa tropa de 11,000 soldados chilenos desembarcó en Moquegua. Desde allí, los Chilenos enviarían un batallón para liquidar a las tropas de Bolognesi.
En Arica, aún recuperándose de sus heridas, Ugarte enferma de paludismo. Debido a su débil condición, le aconsejaron retirarse. El mismo había confesado tener “el ánimo completamente aniquilado al pensar en que podría desaparecer en esta campaña y abandonar a su madre y hermanas que necesitaban de su apoyo.” Pero él ya había decidido su destino.
En su testamento confirmó su deber de “afrontar el peligro contra los ejércitos chilenos que hoy invaden el santo suelo de mi Patria y a cuya defensa voy dispuesto a perder mi vida con la fuerza de mi mando.”
En la batalla de Arica, el 7 de Junio de 1880, mas de 5,000 soldados chilenos se enfrentaron a 1,900 soldados peruanos. Ugarte, cabalgando un corcel, dirigió a nuestras debilitadas fuerzas en el morro de Arica. Murió defendiendo la bandera nacional.
Mas que un gesto patriótico, Ugarte mostró una gran lealtad con su gente. A pesar que su mundo se derrumbaba, Ugarte nos enseñó hasta que límites llega la grandeza humana. Nos legó un instinto de coraje, solidaridad y lealtad, con los cuales alcanzó la inmortalidad.
Fuente: https://perusumaq.com/
SUMAQ Media -´116th St & Broadway - Manhattan, New York 10027 U.S.A
En el sector público llegó a ser alcalde de Iquique , fué miembro de la Beneficencia local y uno de los fundadores en diciembre de 1870 de la Compañía de Bomberos de Iquique, una de las más antiguas del Perú, llegando a ser tercer teniente de la misma.
(Fuente: https://blog.derrama.org.pe/y-quien-fue-alfonso-ugarte/)
Al inicio de la Guerra del Pacífico, Alfonso Ugarte, que se encontraba en preparativos para viajar a Europa por asuntos de negocios de la firma Ugarte Zeballos y Compañía que él mismo había creado, decidió quedarse en su ciudad natal para contribuir personalmente en su defensa. Organizó un batallón con su propio dinero, batallón integrado por obreros y artesanos de Iquique, al que nombró como el Batallón “Iquique N° 1”, conformado por 429 soldados y 36 oficiales, cuyo mando asumió. Hizo testamento y dejó constancia que aplazaba su matrimonio con su prima Timotea Vernal.
Ante el peligro inminente, Ugarte decide quedarse. En esos meses aciagos, sus amigos chilenos le ofrecieron protección y le sugirieron salvar sus riquezas. Por entonces, el Almirante Miguel Grau libraba la batalla de su vida en el mar sureño.
No es difícil imaginar entonces la presión que recibió Ugarte para abandonar el Perú. En su círculo, la mayoría ya había optado por fugarse a Europa. Era lo más sensato para ellos. El país estaba en bancarrota y no habían armas ni tropas. La armada estaba tan desamparada, que el coronel en retiro Francisco Bolognesi pidió volver a la actividad. Ugarte debía ponerse a salvo, y proteger a su madre y a sus hermanas. No debía arriesgarse, pues su futura esposa lo esperaba. Pero Ugarte resistió esas presiones y decidió defender al Perú.´
Ugarte reclutó a casi quinientos hombres (entre obreros y artesanos) para defender Tarapacá. Gastó una fortuna para organizar y mantener ese regimiento. Entregó 10,000 soles para la compra de armamento, además de donar 1,000 soles mensuales a las tropas de Bolognesi. Sin tener vocación militar, ni saber mucho de guerra, Ugarte se hizo coronel.
Y todo ese tiempo, Ugarte supo que todo era en vano. Al leer sus cartas, el lector percibe que Ugarte ya sabía cuál era su destino.
En una carta a su primo, Ugarte escribió:
“Tenemos pues, que cumplir con el deber del honor defendiendo esta plaza hasta que nos la arranquen a la fuerza. Ese es nuestro deber y así lo exige el honor nacional. Estamos esperando ser atacados por mar y tierra…. Estamos resueltos a resistir con toda la seguridad de ser vencidos, pero es preciso cumplir con el honor y el deber… ¡Qué desesperante es mi situación!, pero no por eso me doy por vencido sino que por el contrario debo hacer los mayores esfuerzos en la defensa de la honra nacional…”
Ugarte participó en la batalla de Tarapacá, el 27 de Noviembre de 1879. Aunque fue herido en la cabeza, le sobraron fuerzas para auxiliar a los heridos. Días después se trasladó a Arica, con el fin de asistir al coronel Francisco Bolognesi. Quizá lo hizo al presentir lo que sucedería luego. Efectivamente, el 31 de Diciembre de 1879, una poderosa tropa de 11,000 soldados chilenos desembarcó en Moquegua. Desde allí, los Chilenos enviarían un batallón para liquidar a las tropas de Bolognesi.
En Arica, aún recuperándose de sus heridas, Ugarte enferma de paludismo. Debido a su débil condición, le aconsejaron retirarse. El mismo había confesado tener “el ánimo completamente aniquilado al pensar en que podría desaparecer en esta campaña y abandonar a su madre y hermanas que necesitaban de su apoyo.” Pero él ya había decidido su destino.
En su testamento confirmó su deber de “afrontar el peligro contra los ejércitos chilenos que hoy invaden el santo suelo de mi Patria y a cuya defensa voy dispuesto a perder mi vida con la fuerza de mi mando.”
En la batalla de Arica, el 7 de Junio de 1880, mas de 5,000 soldados chilenos se enfrentaron a 1,900 soldados peruanos. Ugarte, cabalgando un corcel, dirigió a nuestras debilitadas fuerzas en el morro de Arica. Murió defendiendo la bandera nacional.
Mas que un gesto patriótico, Ugarte mostró una gran lealtad con su gente. A pesar que su mundo se derrumbaba, Ugarte nos enseñó hasta que límites llega la grandeza humana. Nos legó un instinto de coraje, solidaridad y lealtad, con los cuales alcanzó la inmortalidad.
Fuente: https://perusumaq.com/
SUMAQ Media -´116th St & Broadway - Manhattan, New York 10027 U.S.A
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COMENTARIOS DE SU FALLECIMIENTO
El
cadáver de Ugarte fue hallado al pie del Morro, tal como lo consignó el párroco
de Arica, José Diego Chávez, en el libro de entierros, con fecha del 15 de
junio de 1880, siendo colocado el cuerpo en un nicho del panteón local.
El
cuerpo identificado como el del Coronel Alfonso Ugarte fue traído a Lima en 1890, junto con
los restos de otros combatientes caídos en la guerra.
En la edición del 10 de
julio de 1890 del diario limeño El Comercio, se menciona que antes
de la repatriación, su cajón fue abierto en Arica y «se encontraron fracciones
del cuerpo y un calcetín de hilo con la marca de su nombre». Un grupo de
ilustres Tarapaqueños llevaron los restos en fúnebre cortejo hasta el mausoleo
del mariscal Castilla
.
Años
más tarde, dichos restos fueron depositados en el mausoleo familiar que había
construido la madre del héroe en el cementerio de Lima. Posteriormente fue
trasladado a la Cripta de los Héroes de la Guerra de 1879, en el Cementerio Presbítero
Maestro,
donde reposa actualmente, en el tercer nivel, dentro de un sarcófago.
Intentando
dilucidar la controversia sobre el cadáver del héroe, Geraldo Arosamena Garland
logró en 1979 – en su calidad de presidente del Centro de Estudios
Histórico-Militares del Perú– la autorización de abrir la supuesta tumba de
Alfonso Ugarte, encontrando, efectivamente, sus restos y parte de su uniforme
envueltos en una bandera peruana. Estaban en buen estado, sobre todo el cráneo
y la cara.
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Importancia de la gesta Heroica del Cnel. Alfonso Ugarte
Sería injusto reducir el heroísmo de Alfonso
Ugarte a su épica muerte en el morro de Arica.
En realidad su heroísmo comienza
ni bien empieza la guerra, pues siendo un joven adinerado y proyectando un
viaje de negocios a Europa, decidió quedarse en su patria para contribuir
personalmente con su defensa. Los recursos económicos de su familia los puso a
disposición de su país amenazado, en un singular gesto de desprendimiento. Él
mismo, formó, pertrechó, vistió y mantuvo con su propio peculio a todo un batallón,
el Iquique, cuyo mando tomó. Siendo solo un civil, con improvisada
formación militar, demostró valor y tenacidad en el campo de batalla. Herido
seriamente en la batalla de Tarapacá, no quiso ir a Arequipa a atender su
curación. Tampoco cuando contrajo el paludismo quiso abandonar el servicio.
Su heroico sacrificio en Arica fue la
culminación natural de una entrega constante y persistente al servicio de su
patria. «Alfonso
Ugarte, el millonario de Tarapacá, el joven apacible, se lanzó simbólicamente
con su caballo a la inmensidad mucho antes del 7 de junio.», ha
dicho Jorge Basadre. Cualquiera sea la verdadera circunstancia de su muerte en la
defensa del Morro, nada amengua su categoría de héroe peruano por antonomasia.
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ALFONSO UGARTE , Baluarte del Heroismo Peruano
" EL UGARTINISMO "
El Ugartinismo, implica reconocer la inmolación heroica del Coronel Alfonso Ugarte y a partir de aquella épica pagina de nuestra Historia, haciendo cada día mas grande nuestro amor por el Perú ;tal como nos inculcaron nuestros maestros, en las aulas de la otrora Gran Unidad Escolar "Alfonso Ugarte" - San Isidro, Lima.
En tal sentido, consideramos muy oportuno hacerle una pregunta a los compañeros de la Promoción " Sesquicentenario " del año 1971.
¿Como influyó en tu vida la imagen de Alfonso Ugarte?
SEÑOR MARIO CARPIO CIEZA:
Diseñador Gráfico, Desarrollador web y Emprendedor on line Manager en Carpio Graphic Design Inc. 07/06/2018.
Mi apreciado amigo y compañero de Promoción 1971 de la GUE Alfonso Ugarte, Don Guillermo Canales, en el transcurso de gratas conversaciones, me hizo mención a que le gustaría saber cómo había influido en mi educación la figura de nuestro héroe nacional el Coronel Alfonso Ugarte. Tarea difícil y a la vez agradable ya que ponía en ejercicio mi memoria llevándola varios lustros en el tiempo a recordar mis años de juventud estudiantil.
Quisiera comenzar haciendo referencia unos párrafos leídos de dicha época: El siguiente testimonio recogido por Basadre es un artículo de La Patria de Lima, del día 21 de junio de 1880: "El último acto de la corta pero interesante carrera de Alfonso Ugarte revela cuanto era capaz esa alma verdaderamente grande. Acosado por innumerables enemigos, vencido ya en la cumbre del Morro histórico, presenciando la mutilación de los caídos, la profanación de esas reliquias sagradas del heroísmo, quiso sustraerse a las manos enemigas y clavando las espuelas en los ijares de su caballo, se lanzó al espacio desde aquella inmensa altura para caer despedazado sobre las rocas de la orilla del mar”.
Fueron estos relatos los que nos llevaron como estudiantes a admirar la figura de nuestro patrono escolar e inculcarnos un sentido patriótico (hoy venido a menos por las actuales generaciones) que fue el caldo de cultivo para nuestra formación académica y personal; ésta y la solemnidad con la que nuestros maestros nos inculcaron valores extraordinarios, nos llevaron a caminar con orgullo portando nuestra maravillosa insignia AU.
Los años transcurridos, forjando grandes amigos y pequeñas sociedades dentro del claustro escolar han hecho de cada uno de nosotros personas de bien, llevándonos a enfrentar la vida de distintas maneras, muchos con gran éxito. Hoy ya caminando por la década de nuestros 60 años podemos sentirnos orgullosos de esas memorias y con gran entusiasmo se las relatamos a nuestros hijos y quizá ya también a nuestros nietos, que nosotros pertenecimos a una generación inspirada en grandes hombres y continuamos con el ejemplo: Voluntad, Disciplina y Acción.
SEÑOR. CESAR ZEVALLOS COLAN:
Ex integrante de la P.I.P. (Policía de
Investigaciones del Perú ) , hoy Policía Nacional del Perú con 30 años de servicios de combate a la
delincuencia, narcotráfico y terrorismo
(07/06/2018)
.
” El haber estudiado en la Gran Unidad Escolar Alfonso Ugarte del distrito de San Isidro, Lima - Perú, ; me ha permitido ver desde muy joven la imagen del Coronel Alfonso Ugarte, como un héroe nacional, que se volvió un referente en mi vida ; constituyéndose en una base sobre la cual asumí elementos de cohesión e identidad personal, permitiéndome fortalecer los valores inculcados en mi núcleo familiar y tomar la decisión después de pasar por las aulas de la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV), postular a la Escuela de la Policía de Investigaciones del Perú (PIP), para servir a la sociedad en la lucha contra la delincuencia, narcotráfico y terrorismo, entre otros, delitos que siguen azotando al pueblo peruano, desempeñándome cono funcionario publico (Policía), por espacio de treinta (30) años consecutivos.
” El haber estudiado en la Gran Unidad Escolar Alfonso Ugarte del distrito de San Isidro, Lima - Perú, ; me ha permitido ver desde muy joven la imagen del Coronel Alfonso Ugarte, como un héroe nacional, que se volvió un referente en mi vida ; constituyéndose en una base sobre la cual asumí elementos de cohesión e identidad personal, permitiéndome fortalecer los valores inculcados en mi núcleo familiar y tomar la decisión después de pasar por las aulas de la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV), postular a la Escuela de la Policía de Investigaciones del Perú (PIP), para servir a la sociedad en la lucha contra la delincuencia, narcotráfico y terrorismo, entre otros, delitos que siguen azotando al pueblo peruano, desempeñándome cono funcionario publico (Policía), por espacio de treinta (30) años consecutivos.
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